El escritor, humanista y economista español, José Luis Sampedro hace apología del sentido común y la lógica al analizar la reciente visita del papa Benedicto XVI a la capital española. Hace referencia a la constitución española que describe esta nación como aconfesional para argumentar una colonización de la mente de la población ya desde las edades más tempranas. Retrata la religión cristiana en España como una verdadera creencia en extinción que se ha reducido a un mero acontecimiento social. De hecho, va más allá, defendiendo que la fe que se inculca desde niños es un gran obstáculo para crear demócratas, muy necesarios en una democracia real, porque posteriormente les cuesta mucho más esfuerzo tener una opinión verdaderamente propia que haga realmente válido su voto, esencia de un estado democrático.